La arquitecta e interiorista Bárbara Vergara cambió hasta la puerta en la entrada
Rodrigo Jara, de El blog del decorador, cree que la gente ha ido cambiando la manera en la que habita sus espacios.
«La idea es que esta sea una inversión que perdure en el tiempo. Además se justifica porque como se trata de una casa antigua tenía problemas de otro tipo: los papeles murales se estaban despegando y había humedad».
A continuación, el detalle.
Más juego con la luz. «Las lámparas antiguas eran las típicas que van al cielo, tipo plafones, que tampoco dejan pasar mucho la luz. Ahora en cambio son de diferentes estructura y alturas, lo que modifica la caída de la luz. Se usaron también toques de bronce dorado, para irle dando una onda más moderna».
Fuera cortinas, hola termopaneles. «Las cortinas clásicas las cambiamos por rollers. Con una cortina clásica, aparte de que tiene un diseño y se ve pesada, quita parte del espacio de la ventana. El termopanel tiene un color café oscuro, lo que hace un contraste con el blanco y los otros colores».
Un nuevo comedor. «Algo que es muy clásico en las casas antiguas son los muebles con una madera oscura, todo del mismo tono. Eso hace que se vea como un sólido completo en el espacio. Nosotros lo cambiamos: pusimos muebles con diferentes tonos de madera para que hagan un juego de colores. Y usamos una mesa de vidrio con la que el espacio se ve más amplio».
El hall. «El espejo de cuerpo entero es el elemento que siempre incorporamos en los halls. En esta pared quisimos aprovecharla al máximo, y usamos uno que no es común y corriente, sino que es medialuna que se relaciona con las lámparas y con el juego de las circunferencias. Así le dimos una estética más moderna».
Nueva puerta. «Al cambiar todo y modernizarlo, la puerta también es un aspecto importante. Aquí, además está el tema de la chapa: instalamos una eléctrica. El color original de la puerta era anaranjado, acorde con los muros amarillos que también cambiamos».
La diseñadora prefiere no contar cuanto costó el arreglo. «Cada proyecto es un mundo, todos tiene complejidades distintas. No tengo un valor fijo», afirma.
Opinan interioristas
Aunque dice que no suele opinar sobre el trabajo de otras personas del rubro, Rodrigo Jara, de «El blog del decorador», hace una evaluación.
«En general este trabajo me parece bien. Hay cosas que yo podría haber resuelto de otra forma, pero creo que cumple con esta visión un poco más actual del espacio, se ve mucho más contemporáneo, como que le dio un poco más de vida y más de luz. Cumple con el objetivo de sentirse más actual».
¿A qué obedece que este diseño se vea más moderno?
«Yo lo tomo así como un poco post-Covid, porque la gente empezó a vivir en sus casas, entonces ¿cómo puedes lograr que no se sienta tan fría y sea un poco más cálida? Por eso se ocupan este tipo de maderas más nobles, pensando también en que la gente no quiere limpiar, no quiere tener tantas cosas, y por eso también las líneas son mucho más simples».
La luz llama la atención.
«Con esos detalles de luz no necesitas, por ejemplo, poner un cuadro, un espejo o algún otro objeto».
De acuerdo a Bito Feris, decorador e interiorista y director de Estudio BF, una buena decoración debe estar vigente «tanto en el año ochenta como en el 2040».
Explica que la mejor manera de que algo se vea anticuado es siguiendo una moda. «Pero si tú haces una decoración ecléctica que en teoría es clásica, pero con arte moderno y con algunos accesorios de tendencia, no debería verse anticuada».
En las fotos de ven cenefas, ¿qué opina de ellas?
«Me encantan. No tienen por qué pasar de moda, puedes usarlas en todas partes. La gente no las usa porque las han estigmatizado como algo de los años 90, pero creo que pueden haber de yeso o de madera».