Programa Idevo40+ del Club de Innovación enseña desde estrategias financieras hasta marca personal
La convocatoria es para mayores de 40 años, ya que existen muchos programas orientados a jóvenes y a esa edad ya tienen una red de contactos que facilita la generación de negocios.
Si tiene una idea innovadora, también tiene la oportunidad de transformarla en un negocio. Se abrieron 50 becas para recibir formación especializada y herramientas para concretar su emprendimiento de forma segura.
El programa formativo Idevo40+ del Club de Innovación, con el apoyo de Corfo Regional y el instituto profesional AIEP, lanzó la convocatoria para esta iniciativa, dirigida a mayores de 40 años residentes en la Región Metropolitana.
Se requiere una idea de emprendimiento innovadora y con potencial de crecimiento en áreas específicas como economía circular y sostenibilidad, salud y bienestar, logística y movilidad, entre otras
Los seleccionados deberán cursar siete módulos teórico-prácticos, para aprender a?estructurar un modelo de negocio, optimizar las finanzas, desarrollar estrategias de marketing y potenciar la presentación profesional, entre otros ítems.
«Si tiene una idea, primero hay que evaluar que tan innovadora pueda ser, sobre todo revisar la propuesta de valor, es decir, revisar cuál es el valor único que ofrece dicho emprendimiento, si resuelve el problema de un potencial cliente y qué lo hace diferente frente a la competencia en el mercado. Si es innovador, no necesariamente es que no exista hoy en día en el mercado, ya que las innovaciones también pueden ser mejoras continuas. O bien, en el pivoteo del modelo de negocio también se generan innovaciones que resultan útiles para el mercado y la demanda», explica Adriana Guerrero, gerenta general de Club de Innovación.
¿Por qué enfocarse en mayores de 40 años?
«Los emprendedores que superan los 40 años han acumulado experiencia, eso se traduce que han enfrentado múltiples desafíos a lo largo de su carrera, lo que los hace más resilientes. Es un factor a su favor, pues entienden los problemas reales del mercado y en varios casos poseen una red de contactos que facilita la generación de negocios. Además, vemos que muchos programas de aceleración, incubadoras y concursos están diseñados para perfiles más jóvenes, lo que puede generar barreras de acceso a oportunidades clave para escalar sus negocios, sesgando a un segmento de nuevos emprendedores que tienen un alto potencial».
Gloria Moya, directora de Corfo Regional de la Región Metropolitana, espera retener el talento en este segmento de edad con formación y acompañamiento de expertos.
Una vez finalizados los cursos, la idea es que los emprendedores movilicen sus redes de contacto.
«Lo importante no es solamente avanzar en cursos teórico-práctico, sino también hacer el empalme con el potencial networking que se pueda generar durante el desarrollo del programa», dice Guerrero.
Las postulaciones están abiertas hasta este 22 de abril de 2025 en idevo40.cl (o en el link https://goo.su/vi9x8). Las clases son los viernes de 17:00 a 20:00, en la sede San Joaquín en AIEP, entre el 9 de mayo y 14 de agosto de este año.
Mayor riesgo
Ángel Morales, director Ejecutivo de la aceleradora de negocios UDD Ventures, de la Universidad del Desarrollo, indica que las ideas innovadoras apelan desde crear algo que no existía en el mercado hasta abordar un segmento de clientes, canales de venta, hasta incluso propuesta de valor.
«Una idea innovadora primero perturba y, luego, si genera un valor real comenzará a ser adoptada por los llamados adoptadores o clientes tempranos», describe.
Por lo mismo, esos proyectos son más riesgosos y se debe estar dispuesto a perder, dada la alta probabilidad de fracaso.
«Es aprendizaje puro y duro. De hecho, ocho de cada diez emprendedores innovadores cierran al quinto año de operación», adelanta.
Para evitar que un emprendimiento muera, es vital tener un plan: «Hay que tener caja suficiente para soportar un periodo sin ingresos fijos o subsidios públicos y un roadmap (hoja de ruta) de crecimiento con hitos comerciales, de producto y financiamiento. Y lo que es un desde: si no tienes un equipo de alto desempeño, por pequeño que sea, no tendrás mucho que hacer en el mercado».
Felipe Venegas, subdirector de Innovación del Instituto AIEP, agrega que una dificultad es soportar el tiempo de espera.
«Un emprendimiento innovador para llegar a tener un modelo de negocios concreto, tiene que probar, testear, prototipar y eso podría tomar algo más de tiempo que lanzarse con un emprendimiento tradicional. Hace que el camino sea más complejo. Un emprendedor quiere vivir de lo que hace, aumentar sus ventas, crecer y ojalá eso pase lo antes posible», advierte.
Con formación
«No hay mejor curso, diplomado o magíster que aprender haciendo, es decir, probando con un emprendimiento real en caso de que esto sea factible. Y de quebrar, que no te deje en la calle», destaca Morales.
No obstante, dice que de todos modos siempre sirve formarse en el área si no se estudió algo relacionado con negocios
«Sirve mucho tomar programas cortos en tres áreas: gestión comercial, control de gestión en finanzas y estrategia para escalamiento de empresas. Lo anterior suponiendo que el equipo emprendedor es conocedor del producto y que sabe lo que hacen», destaca.
Y también es importante acompañarse del ecosistema de innovación chileno, dice Venegas.
«Hay diversos espacios que apoyan a que las ideas se desarrollen o se conecten con otros actores u organizaciones. Hay Centros de Negocios de Sercotec, programas de apoyo al emprendimiento como el que está liderando el Club de Innovación, las municipalidades y distintas organizaciones que tienen alternativas que permiten tener una base de apoyo para que no se sientan que están solos en esto», dice.