Fernando Sabag Montiel disparó sin éxito a la cabeza de la entonces vicepresidenta de Argentina
Sabag Montiel fue sentenciado por los delitos de intento de homicidio agravado por mediar un arma de fuego y por portación de arma de guerra sin la debida autorización legal.
Pasadas las 13 horas de este miércoles y tras casi cuatro horas de espera, el Tribunal Oral Federal Nº 6 de Buenos Aires (TOF N°6) condenó a 10 años de cárcel a Fernando Sabag Montiel, el hombre que en septiembre de 2022 apuntó con un arma a la cabeza de la entonces vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, cuando llegaba a su domicilio. Junto a él, también fue sentenciada su exnovia, Brenda Uliarte, quien deberá pasar ocho años en privación de libertad por el intento de magnicidio, informó «Página 12».
Previo a la lectura de la condena, el TOF N° 6 permitió a los condenados poder dar sus últimas palabras. El primero en declarar fue Nicolás Gabriel Carrizo, quien había sido apuntado como el líder de la banda de «Los Copitos» y que fue absuelto en la audiencia, luego de que previamente en agosto fuera liberado, tras comprobarse que no tuvo ninguna participación en el hecho.
En su alocución, Carrizo cuestionó al tribunal por haber estado detenido durante tres años siendo inocente. «Me parece un poco injusto que vaya gente presa y que tenga que esperar tanto tiempo para llegar a un juicio y recién ahí le digan ‘te podés ir en libertad’. Siento impotencia por dentro, por estos tres años que nadie me los va a devolver. Me gustaría que esto no le pasara a nadie más», declaró, según recogió «Clarín».
En segundo lugar, Sabag expuso frente al tribunal una serie de afirmaciones sin sentido, tratando de instalar que su paso por la cárcel es de carácter político, intentando hacer un paralelismo entre su juicio y el caso Nisman, siendo interrumpida en varias ocasiones por la jueza y presidenta del Tribunal, Sabrina Name, quien le pidió que se enfocara en su audiencia. Entre sus desvaríos, sugirió que quieren matarlo y que su cuerpo «se lo quieren tirar» al diputado del Pro, Gerardo Milman, quien fue investigado como presunto autor intelectual del Sabag, en medio de la foto, se acercó a la mandataria y apuntó la pistola calibre 32 hacia la cabeza de Cristina, presionando dos veces el gatillo, sin dispararse milagrosamente ninguna bala. Sabag Montiel fue sentenciado por los delitos de «intento de homicidio agravado por mediar un arma de fuego» y por «portación de arma de guerra sin la debida autorización legal». atentado, manifestando que le parecía muy bajo «cómo lo incriminaron».
Asimismo, también mencionó al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, a quien culpó de querer llevárselo a Brasil para que cumpla su condena. «Todos sabemos que (Lula) fue a visitar a Cristina y le pidió expresa y personalmente que se encargue de mi situación», declaró, esbozando que entre el peronismo argentino y el gobierno brasileño se estaría planeando «una supuesta intención de extraditarlo que tendría el país vecino», publicó «La Nación».
Uliarte, por su parte, quien fue condenada como «partícipe necesaria» en el atentado, no hizo uso de sus «últimas palabras» y se mantuvo en silencio y atenta a las declaraciones de los otros condenados, mientras era custodiada por varios agentes del Servicio Penitenciario Federal, resguardando para que no interactuara con ninguna persona. A los diez años que le dio el TOF Nº 6 a Fernando Sabag por los cargos de «intento de homicidio agravado por mediar un arma de fuego» y por «portación de arma de guerra sin la debida autorización legal», se le suman cuatro años más de prisión por el delito de «tenencia de material de explotación sexual infantil», sumando una pena de 14 años tras las rejas, consignó «Clarín».
Según la reconstrucción de la Fiscalía, la pareja tomó previamente la decisión de asesinar a la vicepresidenta con la finalidad de «impedir que siga desarrollando su vida política» e idearon un plan para llevar a cabo su cometido. Fue así como se infiltraron entre la multitud frente al domicilio de Fernández de Kirchner, cuando Sabag se acercó a la mandataria y apuntó la pistola calibre 32 hacia la cabeza de Cristina, presionando dos veces el gatillo, sin dispararse milagrosamente ninguna bala, siendo detenido por la multitud y luego por la seguridad de la vicepresidenta, publicó Infobae. Los fundamentos de la sentencia serán dados a conocer el próximo 9 de diciembre.